El estudio Índice EY del futuro del consumidor, muestra los cambios que ha sufrido el consumo en medio del confinamiento. Según esto, a raíz de la pérdida de empleos el 78% de los mayores de 45 años ha disminuido sus compras y el 64% gasta únicamente en lo indispensable.
Además, muestra que el confinamiento aceleró el cambio que se estaba dando en el consumo, ahora cerca del 33% de los consumidores reevaluará las cosas que más valora y el 25% pondrá más atención a lo que consume y el impacto que esto tiene para el planeta.
Eso debido a dos motivos, en la primera etapa de la crisis, el consumo en el sector de la moda bajó sustancialmente, mientras que el de los productos de necesidades básicas creció. Entre otras cosas, deja en evidencia que una vez superada la crisis solo el 31% de los consumidores volverán a la normalidad pues son aquellos que no se vieron gravemente afectados por la pandemia.
Otro 25% son extravagantes, pero responsables, son quienes gastarán en elementos necesarios. Quienes están en este grupo, en su mayoría, tienen ingresos medios/altos y tendrán mayor enfoque en salud.
Finalmente, el 40% de los consumidores cree que actividades como la forma de viajar, de socializarse y de hacer compras van a cambiar sustancialmente una vez superada la crisis. En esencia, el panorama actual obliga a tener soluciones digitales para los productos de primera necesidad, pero también para aquellos que hacen parte del ocio.