Los dos administradores nombrados en 2018 fueron revocados, pero se niegan a entregar.
Dos meses después que la Junta de Comuneros que tienen derechos sobre bienes del Fondo Ganadero del Meta en liquidación revocaron el mandato de los dos administradores de esos bienes, ellos se niegan a entregarle al nuevo administrador.
Los dos administradores revocados son Alejandro Benavidez Diazgranados, quien recauda aproximadamente $200 millones mensuales del Complejo Ganadero Catama, y Juan Sebastián Coy Usme, quien recauda aproximadamente $130 millones mensuales por la Hacienda San Antonio, de 460 hectáreas, ubicada en la vía a Puerto López.
Y el nuevo administrador que nombró la Junta de Comuneros a finales de enero es César Riqui Oliveros Cárdenas.
El abogado Fabio Robayo dijo que se revocó el mandato de Benavides y de Coy porque en 4 años no han rendido cuentas a los 1.131 comuneros que integran la comunidad de bienes remanentes del Fondo Ganadero del Meta.
Benavides argumentó que en la reunión de la Junta de Comuneros participaron personas que ya murieron y por lo tanto no tiene legitimidad, pero el abogado Robayo explicó que, si bien algunos accionistas que tuvo el Fondo Ganadero ya murieron, sus herederos siguen con los derechos sobre los bienes comunes que quedaron.
Tan legítima fue la reunión que fue la delegada del Ministerio de Agricultura, Consuelo Inés Núñez Pinzón, la encargada de notificar a los administradores revocados la decisión tomada por la Junta General de Comuneros.