Este viernes gremios y autoridades analizarán inviabilidad de que ahora cueste más viajar entre Bogotá y Villavicencio.
Desempleo, incompetitividad y menor aforo vehicular, son algunos de los factores que podrían generar un eventual reajuste en el cobro de los tres peajes que hay entre la vía que conecta a Bogotá con la capital del Meta y los llanos orientales.
Por esta razón, el próximo viernes 21 de febrero, la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) y representantes gremiales de la región, instalarán una mesa de trabajo en la que se expondrá el por qué se debe replantear el alza del 11%.
“La idea es lograr que esa alza sea recíproca y gradual a las necesidades del territorio, pero desde la base de conocimiento de lo que está sucediendo en el territorio, esperamos que sigamos trabajando en equipo tanto el concesionario como el mismo gobierno”, indicó Giovany Angulo, vocero de la veeduría de la vía al Llano.
El alza del 11% en los peajes, que se comenzó a cobrar desde el fin de semana, ha generado todo tipo de rechazo a nivel regional, en especial porque no solo el aumento es casi el triple al del costo de vida, sino porque además no hay totalidad de garantías de movilidad por las obras pendientes, como el puente de Chirajara y los trabajos de contención en el kilómetro 58, entre otros.