Desde este viernes 16 de octubre se levanta la restricción a la movilidad nocturna que durante más de un semestre estuvo vigente en la capital del Meta.
Andrea Lizcano, secretaria de Gobierno local, explicó que la decisión se tomó teniendo en cuenta que el análisis de las cifras de contagio de Covid-19 van a la baja, lo que permite no prorrogar la medida.
“No extendemos el toque de queda, ni ninguna otra medida siempre y cuando la responsabilidad ciudadana nos lleve a que las cifras (de contagio) sigan bajando, el alcalde ha sido muy claro y ha dicho que, si las cifras empiezan a subir, las medidas tendrán que volver, así que todo está en manos de la comunidad”, indicó la funcionaria.
Los establecimientos nocturnos que vendan licor para consumo sólo podrán funcionar hasta las 12 de la noche.