En Los Pozos (Caquetá) quedaron las huellas de la violencia.
Anoche en Neiva se reencontraron con sus familias los 78 policías que estuvieron secuestrados en la vereda Los Pozos de San Vicente del Caguán, Caquetá, por miembros de la comunidad. Uno de ellos, el subintendente Ricardo Monroy, fue asesinado en el lugar cuando intentaba impedir el ataque a las instalaciones de la petrolera china Emerald. Un campesino también murió en los enfrentamientos.
Los campesinos llevaban un mes exigiendo la pavimentación de la carretera que une a San Vicente del Caguán con Las Delicias. Cuando comenzaron a incendiar las instalaciones de Emerald, el Esmad intervino.
Alojamientos y camionetas al interior del campamento petrolero quedaron reducidos a cenizas. Los policías y algunos funcionarios de la petrolera fueron retenidos durante dos días. El viernes estuvieron en la zona los ministros del Interior y de Defensa, quienes lograron que los campesinos dejaran en libertad a los retenidos.
El presidente Gustavo Petro anunció que irá a dialogar con los campesinos. “Personalmente iré a dialogar con los campesinos sobre sus necesidades, sus quejas, sus reclamos”.
Pero advirtió que las acciones violentas lo que hacen es destruir los caminos de la paz y que la Fiscalía deberá investigar para identificar a los responsables de los dos muertos que dejaron los disturbios en Los Pozos.