Coviandes señaló que los constantes desprendimientos de rocas y lodo, y las condiciones climatológicas que dificultan el inicio de los trabajos de limpieza, no han permitido fijar fecha para la apertura de la vía Bogotá – Villavicencio.
Según el concesionario, la instalación del radar ha permitido establecer que debe continuarse con las medidas preventivas en el km 58, para garantizar la seguridad, teniendo en cuenta que continúa registrándose caída de piedra y deslizamiento de material en el sector.
Estas afectaciones han impedido iniciar las labores de limpieza en la parte inferior del talud. No obstante, en la parte superior se iniciaron los trabajos para la construcción de las terrazas.
Coviandes explicó que aunque el personal y la maquinaria ha estado disponible en el lugar de los hechos, las autoridades no han autorizado el ingreso al sitio donde permanece algo más de 15 mil metros cúbicos de material, producto de los derrumbes que se presentan desde el pasado domingo y que mantienen cerrado el corredor vial en los puntos definidos en el Plan de Atención de Emergencias.
La concesión reiteró que no hay una fecha establecida para la apertura de la vía Bogotá – Villavicencio, debido a la difícil situación no permite por ahora tener claridad el momento en que se pueda iniciar los trabajos para despejar la vía al llano.