Javier Ordóñez fue víctima de tratos crueles e inhumanos que le causaron intenso dolor
La juez 29 de control de garantías de Bogotá aseguró que la inspección técnica al cadáver de Javier Ordóñez que se efectuó sobre las 3:30 de la madrugada del pasado 9 de septiembre evidenció los fuertes golpes que recibió el hombre durante una hora y 40 minutos.
“Se encontraron en varias partes del cuerpo, escoriaciones o sea lesiones en la piel, que se producen por la roce continúo de algo, abrasiones (lesiones causadas por traumatismos), laceraciones, heridas en tejidos blandos, hematomas; tenía signos de violencia según anotan los policías judiciales”, detalló la funcionaria judicial.
Agregó que los patrulleros detenidos por estos hechos habrían incurrido en una conducta violenta en contra de Ordóñez quien fue detenido cuando consumía bebidas alcohólicas en vía pública.
“Precisamente les imputan la tortura por esos tratos crueles e inhumanos que no eran necesarios, una vez que ya tenían reducido a Javier Humberto mientras que, un policía le tenía oprimida la cabeza y el cuello, el otro estaba con el taser, que produce la contracción de los músculos que impide que la persona se mueva, o sea lo tenían inmovilizado”.
La funcionaria judicial tuvo en cuenta el dictamen del Instituto Nacional de Medicina Legal expuesto por la Fiscalía General en la diligencia de imputación de cargos.