Bastante molestos quedaron varios internautas que siguieron a través de redes sociales la movilización de un nutrido grupo de simpatizantes del uribismo en la capital del Meta.
Sin embargo, el inconformismo más allá de ser por la polarización política que genera el expresidente Álvaro Uribe, tuvo que ver porque varios de los pasajeros de los vehículos que acompañaron la movilización se pasaron por la faja las medidas de bioseguridad en medio de una pandemia que ya supera más de 3.000 contagios en la ciudad.
Manifestantes encima de las puertas de los vehículos, o con medio cuerpo afuera, sin tapabocas o teniéndolo mal puesto, sobrecupo en los vehículos y presencia de niños y adultos mayores, fue algo de lo que se pudo evidenciar a través de medios como Villavicencio Día a Día (Mire aquí la caravana).
Aunque los reclamos comenzaron contra la Alcaldía, incluso desde el momento en que fue oficializada la autorización para la caravana, al cierre de esta publicación no se habían pronunciado frente a los incumplimientos evidenciados, especialmente entre los medios de comunicación que transmitieron en directo la actividad, que duró alrededor de 90 minutos.