La montaña sepultó a más de 500 personas la tarde del 28 de junio de 1974.
La tarde del 28 de junio de 1974 se produjo la tragedia de Quebradablanca, en la vía Bogotá-Villavicencio, cuando la montaña sepultó decenas de vehículos que transportaban a más de 500 personas.
Después del derrumbe se construyeron los túneles de Quebradablanca para reducir los riesgos y el tiempo de desplazamiento.
El cantautor sanmartinero Manuel Orozco escribió un poema que narra la tragedia:
“Hoy estoy muy compungido y el corazón se me ensancha, porque en el sitio iracundo llamado Quebradablanca se marcharon para siempre, en el fondo de la parca, muchas vidas inocentes, buenas y tal vez malas…”
Casi medio siglo después, la montaña sigue cayéndose de a poco y el pasado fin de semana tuvo cerrada la carretera casi dos días en el kilómetro 58, junto a Guayabetal. La diferencia es que ya no sepulta vehículos y personas porque hay monitoreo permanente en los sitios críticos.
La directora de Cotelco Meta, Catalina Niño, teme que para el puente de San Pedro muchos turistas se abstengan de venir al Meta por creer que si vuelve a llover fuerte, la montaña vuelve a cerrar la carretera. El ingeniero José Luis Silva cree que un derrumbe como el que bloqueó tres meses la vía en 2019 no se repetirá porque la causa -la construcción de un túnel, según él- ya no existe.
