Un total de 46 migrantes fueron hallados muertos en un camión abandonado al lado de una carretera en San Antonio, Texas.
El macabro descubrimiento es una de las peores tragedias que involucra a migrantes en Estados Unidos en años recientes, y se da cinco años después de un incidente mortal con características similares que ocurrió en la misma ciudad del centro de Texas, a pocas horas de la frontera con México.
«Hasta ahora son 50 los fallecidos, 22 de México, 7 de Guatemala, 2 de Honduras y 19 todavía sin información sobre su nacionalidad», confirmó el mandatario durante su rueda de prensa matutina desde el Palacio Nacional.
El camión fue encontrado en una zona de poco tránsito, cerca de una vía de tren en el suroeste de San Antonio, que queda a unos 250 km de la frontera entre EE.UU. y México.
«En este momento hemos procesado 46 cuerpos«, dijo a periodistas el jefe de bomberos de San Antonio, Charles Hood.
Indicó que 16 personas -12 adultos y cuatro niños– habían sido trasladadas al hospital vivas y conscientes.
San Antonio, ubicada a unos 250 km de la frontera, es una ruta principal para los traficantes. La ciudad también ha sido azotada por una reciente ola de calor récord que el lunes registró temperaturas de 39,5 ºC.