El pasado 14 de septiembre, la Corporación Autónoma Regional de Santander (CAS), inició la investigación por la muerte de un manatí que fue hallado por habitantes de la zona en la ciénaga de Paredes.
Ese mismo día, el cuerpo del animal fue llevado a una zona aledaña donde le efectuaron una necrópsia que arrojó resultados preocupantes, según lo informó el director general de la CAS, Alexcevith Acosta.
«Su estómago se encontraba vacío, llevaba días sin alimentarse y las hipótesis apuntan que es porque el ejemplar no pudo acceder a donde normalmente encuentra su alimento, ya que las malas prácticas de pesca con trasmallo tienen invadida la ciénaga, impidiendo la movilidad del manatí y el acceso a la comida», indicó Acosta.
Desde la CAS informaron que tampoco descartan que, «la presencia de especies como el búfalo y las afectaciones que estos tienen sobre el recurso hídrico, genera una excesiva presencia de lodos en el agua, disminuyendo las condiciones de desarrollo biológico de las especies, no solamente acuáticas», indicaron.
Expertos tomaron muestras del agua de la ciénaga para descartar alguna contaminación.
Del cuerpo del animal también se tomaron muestras histopatológicas para realizar un estudio diagnóstico, puesto que «tampoco se descarta que la inanición sea a causa de una enfermedad sistémica».
