La prueba casera, que se podría comprar en cualquier farmacia y costaría unos 2 dólares, no solo revelaría el contagio de una persona, sino que también cuál variante sería la predominante en el organismo, detalló el portal especializado Web MD.
El dispositivo casero recoge una muestra de saliva de la persona y en cuestión de horas determinaría un posible contagio con alguna de las variantes ya detectadas del virus, añadió ese medio.
Para que el ‘test’ sea sacado al mercado solamente se necesitaría de la aprobación por parte de la Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos (FDA). Las universidades detallaron que el dispositivo se llamará MISherlock, agregó ese portal.
“La prueba identificó el virus aproximadamente el 96 % de las veces, lo que está a la par con las pruebas de PCR. Además, la prueba detectó tres variantes diferentes de COVID-19: las variantes del Reino Unido, Sudáfrica y Brasil”, reza el estudio hecho sobre la prueba de saliva casera, divulgado por ese portal.
El dispositivo usa reactivos químicos que al entrar en contacto con la saliva (núcleos salivales) de una persona pueden determinar la carga viral. Es decir, si una persona tiene el virus o no, apuntó el portal especializado GEN.
“El dispositivo produce una lectura fluorescente que se puede ver a simple vista. También se diseñó una aplicación para teléfonos inteligentes que puede leer los resultados y enviarlos a los departamentos de salud pública”, manifestó a ese medio la doctora Helena de Puig, profesora de postdoctorado del Instituto Wyss de Ingeniería de Inspiración Biológica de Harvard.