En un operativo sorpresa de la Secretaría de Salud de Villavicencio decomisó 123 kilos de pescado no apto para el consumo humano, en el barrio La Florencia de la capital del Meta.
De acuerdo con información suministrada por la entidad, el propósito de la actividad era iniciar un proceso pedagógico con los comerciantes de pescado, con miras a garantizar el cumplimiento de las normas sanitarias y las buenas prácticas de almacenamiento de este producto ante la cercanía de la Semana Santa.
Pero al encontrar pescado para la venta sin el cumplimiento de los mínimos requisitos sanitarios para su expendio, se procedió con el decomiso.
La secretaria de Salud, Tanya Cortés González, expresó que encontraron “un pescado que no va para consumo. No se va a llevar a ningún hogar ni albergue de animales porque no estaba en condiciones de congelación ni refrigeración. Estaba totalmente al ambiente pisado por moscas. En fin, no había las mínimas condiciones (sanitarias) por lo que no se puede hacer entrega de estos alimentos”,
Y anunció que este tipo de operativos seguirán realizándose por toda la ciudad, sensibilizando a los comerciantes de alimentos y bebidas, en especial de cárnicos, sobre la importancia de la correcta manipulación, transporte, refrigeración y exhibición de los productos para la venta al público.
Agregó que los consumidores de pescado que lleguen a los establecimientos de comercio deben comprar los productos que estén dentro de las neveras o vitrinas refrigeradas. Si el pescado esta exhibido en canastillas, debe estar completamente cubierto con hielo y tapado con un plástico de un solo uso.
Finalmente, Cortés González precisó que para los próximos días la Secretaría de Salud realizará un ciclo de capacitaciones para comerciantes y trabajadores de la industria alimenticia en la ciudad, sobre normas sanitarias, de manera que se logre disminuir el riesgo de intoxicaciones durante la Semana Santa y en cualquier época del año
