El perro robot permaneció en elaboración y estudio 10 años por parte de un grupo de investigadores de la Universidad de Antioquia.
Un grupo de investigadores de la Universidad de Antioquía en conjunto de el Instituto Tecnológico Metropolitano (ITM), se logró elaborar un perro robot con fines educativos para que carreras como veterinaria tengan una cercanía mucho más similar con el animal. La idea es que las actividades se desarrollen y tengan cada vez más realismo para un proceso de formación mucho más especializado.
Según los investigadores, este perro robot será utilizado únicamente para fines educativos para reemplazar a los peluches con los que actualmente tienen clases los estudiantes. Este objeto modelo biomecatrónico cuenta con un cuerpo de un perro real, el cual fue preparado especialmente con componentes para mantener su forma.
Los estudiantes de Medicina Veterinaria serán quienes puedan apreciar clases con este mismo, el cual duró en construcción 10 años donde científicos fueron desarrollándolo poco a poco.
Su fabricación constó de la aplicación de acetona que reemplazó el agua de las células las cuales fueron expulsadas del perro que había fallecido en ese entonces. Posterior a ello se aplicó silicona para que mantuviera su forma y demás aspectos que lo hicieron reflejar con una apariencia mucho más real.