De acuerdo con el informe elaborado por el el Centro Tyndall para la Investigación del Cambio Climático de la Universidad de Manchester, que analiza la dependencia económica de los países con el carbón, el petróleo y el gas, es necesario establecer fechas para eliminar la producción de estos combustibles en países desarrollados y en vía de desarrollo.
La evidencia científica de este análisis, dirigido por el profesor Kevin Anderson, describe que la temperatura media mundial ha aumentado significativamente y que esta situación pone en riesgo el objetivo planteado en el Acuerdo de París de 2015, donde muchos países se comprometieron a realizar acciones para mitigar el cambio climático.
El informe señala que “una transición basada en los principios de equidad requiere que las naciones ricas eliminen toda la producción de petróleo y gas antes de 2034, mientras que las naciones más pobres o en vía de desarrollo tienen hasta 2050 para poner fin a la producción”.
Con esta apreciación, y teninendo en cuenta que el 95 % de la producción total de petróleo y gas tiene lugar solo en 33 países, este proceso estará determinado por la alta o baja dependencia económica que tengan estos sobre la producción de los combustibles.
La investigación también explica que los países que producen más carbón, son los que más lo consumen. Sin embargo, la producción de este mineral en países desarrollados debe caer en un 50% dentro de cinco años y eliminarse efectivamente para 2030. Y en los países en vía de desarrollo se debe disminuir la producción de manera inmediata, si se quiere alcanzar el el cese total de la extracción en 2040.
Aunque las fechas establecidas en este informe son muy cercanas y van en contravía de las que han propuesto los mismos gobiernos, toda vez que en los registros se evidencia una mayor producción de los combustibles. Anderson recomienda una “eliminación gradual” y la cooperación económica entre países, pues reconoce que el golpe económico más fuerte, sería para los países en vía de desarrollo.
