España ha vivido dos olas de calor en menos de un mes y cinco jornadas consecutivas con máximas de 40 grados durante el día.
Casi 60.000 hectáreas quemadas en España es el resultado de los incendios forestales, alimentados por las altas temperaturas durante los últimos diez días, según las primeras estimaciones, unos fuegos que aún permanecen activos y amenazantes en algunas de las regiones afectadas.
Por su parte, el Gobierno español confirmó que en lo que va de año los incendios arrasaron 70.000 hectáreas, hasta el punto de que la cifra de fuegos en el país en 2022 ya dobla la media de los siniestros registrados en el último decenio.
En los últimos días, dos personas fallecieron y 8.000 fueron evacuadas en cuarenta incendios, de los cuales más de la mitad siguen activos con diferentes grados de gravedad.
Ante esta situación, el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, destacó este martes que todavía quedan «días difíciles» en el país, debido al calor propio de la época estival y al viento que está complicando las labores de extinción.
Se reafirmó en la necesidad de impulsar políticas medioambientales, ante la evidente situación de «emergencia climática», para prevenir futuras «olas de calor» , a la vez que pidió prudencia tras avisar de que aún quedan jornadas complicadas.
Las regiones más afectadas por el fuego que aún continúa activo se localizan en el norte (Galicia, Castilla y León y Aragón) y el centro (Castilla-La Mancha) del país.