Los productos altos en grasas, azucares y sodio tendrán que tener un etiquetado frontal de advertencia.
Después de una larga discusión, la plenaria de la Cámara de Representantes terminó aprobando el segundo debate del proyecto de ley que busca regular los productos comestibles y bebibles que tengan altos niveles de grasas, sodio y azúcares.
Estos productos tendrán que llevar una etiqueta frontal que cumpla una serie de requisitos expresados en el texto del proyecto y lo establezca el Ministerio de Salud.
«Para todos los productos comestibles o bebibles clasificados de acuerdo a nivel de procesamiento que superen los umbrales establecidos por el Ministerio de Salud y Protección Social se deberá implementar un etiquetado frontal donde se incorpore un sello de advertencia», señala el proyecto.
De acuerdo a lo aprobado por la plenaria, este etiquetado deberá ser de alto impacto preventivo, claro, visible, legible, de fácil identificación y comprensión para los consumidores, con mensajes inequívocos que adviertan al consumidor de los contenidos excesivos de nutrientes críticos.
Estará en cabeza del Ministerio de Salud la reglamentación de los parámetros técnicos de este etiquetado definiendo la forma, figura, símbolos, textos, valores máximos, colores, tamaño y ubicación en los empaques de los productos que deban contenerlo, basándose en evidencia científica disponible.
Advierte el articulado del proyecto que estos elementos físicos sobre el etiquetado de los productos deben estar, «libre de conflicto de intereses y avalada por el Ministerio de Salud y Protección Social«.