A través de la expedición e inmediata aplicación del decreto 143 de 2020, el alcalde de Villavicencio, Juan Felipe Harman, busca disminuir el número de niños y jóvenes que caigan en el consumo de drogas.
El acto administrativo establece el perímetro en el que no se podrá “ofrecer o comercializar, facilitar o distribuir, portar o consumir sustancias psicoactivas, incluso la dosis personal, en el espacio público o lugares abiertos al público, ubicados dentro del área circundante a las instituciones o centros educativos”.
“Nos vamos a la calle de manera conjunta para pelearnos joven por joven y evitar que los delincuentes les sigan calentando el oído”, dijo el mandatario de los villavicenses, frente a las posibilidades que están teniendo las bandas de microtráfico al ubicarse cerca de las instituciones educativas.
El decreto 143 contempla que no se podrá comercializar, distribuir, ofrecer ni consumir sustancias psicoactivas en un perímetro de 200 metros alrededor de las instituciones educativas, sean jardines infantiles, establecimientos educativos del nivel pre escolar, básica primaria, básica secundaria y media e instituciones de educación superior.
Quien sea sorprendido haciendo caso omiso de estas prohibiciones, será objeto de aplicación de las medidas correctivas señaladas en el parágrafo 2° del artículo 34 de la Ley 1801 de 2016. Así mismo, los menores que cometan algunos de los comportamientos señalados, serán objeto de las medidas dispuestas en la Ley 1098 de 2006.
La Policía Metropolitana, en coordinación con la Secretaría de Gobierno del municipio, realizarán operativos permanentes y continuos en los sitios indicados para verificar el cumplimiento de los dispuesto en el decreto.